La historia que llevan a sus espaldas no es poca, pero la banda parece decidida a protegerla, continuarla y perpetuarla
Hace casi dos meses, Linkin Park regresó a la música tras siete años de inactividad. Con nuevos integrantes, el anuncio de un inminente álbum, un par de singles y algún que otro concierto de una nueva gira a sus espaldas, la banda ha consolidado su regreso de forma triunfal. Y, a pesar de que ciertos oyentes han renegado de la posibilidad de aceptar la existencia de la banda sin Chester Bennington, la gran mayoría ha mostrado su apoyo.
Siendo totalmente conscientes de su legado y de la etapa que dejaban atrás, los integrantes de la banda americana solo podían esperar dos cosas al volver: que saliera muy bien o que saliera muy mal. Todo apunta a que la primera opción se está materializando.
Tras el éxito rotundo de The Emptiness Machine, el primer single de su próximo álbum From Zero, y los múltiples sold outs en los conciertos ya celebrados del From Zero World Tour en Los Ángeles, Nueva York, Hamburgo, Londres y Seúl, Linkin Park demuestra seguir moviendo masas a pesar de todo. Con una gira que no para de anunciar nuevas fechas y nuevas ciudades, las próximas paradas de la banda serán en noviembre en París, Dallas, Bogotá y São Paulo. Además, también han sido confirmados como cabezas de cartel en Sick New World, que, por el momento, será el primer festival en el que toquen desde su regreso.
Porque un hecho innegable es que Linkin Park se consagró como una de las bandas más influyentes en el rock de los últimos tiempos, marcando a fuego a varias generaciones, y eso, desde luego, no es poco peso. Con su regreso, han confirmado que dichas generaciones siguen hambrientas por su música y que, además, la posibilidad de llegar a nuevas generaciones es una realidad.
Conseguir todo esto y seguir adelante sin borrar ni olvidar toda la historia que la banda ha vivido no es tarea fácil, pero parece que el legado se respeta, continúa y nadie lo puede frenar. Dicho propósito ha quedado inmortalizado en Heavy Is the Crown, el segundo single de From Zero. Track que, además, se presentó como el himno del mundial de League of Legends de este año, el cuál terminará la semana que viene.
Producida de nuevo por Mike Shinoda, con la co-producción de Brad Delson y Colin Brittain, la canción trae de vuelta la faceta más potente de la banda con una energía completamente renovada. Desde la ferocidad del rap de Shinoda, en unos versos que perfectamente podría haber cantado hace veinte años en Meteora, hasta la contundencia de los gritos de la recién incorporada a la banda Emily Armstrong, el track parece responder a todas las personas que cuestionaban el regreso de la banda, ya fuera comparando a la nueva vocalista con Bennington o simplemente dudando de sus capacidades.
Como si al componer la canción se hubieran anticipado a lo que iba a pasar, la banda pone el grito en el cielo: ¿esto es lo que queríais? Pues aquí lo tenéis. La corona pesa, el legado de Linkin Park pesa, pero la banda parece más que dispuesta a defender su valía a capa y espada, aunque haga falta un grito de 17 segundos para ello. Porque sí, Armstrong lo grita en esta canción.
El videoclip de la canción, totalmente animado, continúa la tradición guardada por Riot Games en cada uno de los himnos anuales del mundial de League of Legends. En él, se intercalan escenas de la banda interpretando la canción con otras de la lucha entre jugadores y equipos emblemáticos en la historia del juego, entre ellos Lee 'Faker' Sang-hyeok, a quien parecen rendir homenaje en el clip.
Con un nuevo disco al caer, en menos de un mes, varias fechas de conciertos en las próximas semanas y la sospecha de que su From Zero World Tour llegará a muchas más ciudades de las anunciadas hasta ahora, Linkin Park ha vuelto a demostrar de qué son capaces, reafirmando su posición como una de las bandas más influyentes tanto del pasado como del presente.
Today's gonna be the day you notice, 'cause I'm tired of explainin' what the joke is
Heavy Is the Crown ya está disponible en todas las plataformas digitales.